viernes, 30 de abril de 2010

Había una vez... un Angel

Una vez, existió un Angel que solía entretenerse inventando historias, viviéndolas dentro de su corazón, rodeado de calor y felicidad.
En cierta época, aquel Angel fue tentado por el deseo de saber más del mundo, y bajó a él. Allí fue cazado y su corazón lacerado.

Vagó por oscuros callejones, rememorando bellos recuerdos, intentaba sostenerse en pie, deseaba ver la luz del sol, sin embargo los mismos recuerdos de su vida que tanto amó, le destruían por dentro.

Las ratas eran su única compañía y algunos papeles de diario, su único lecho.
Acariciaba su espalda, queriendo alcanzar sus desaparecidas alas, pero estas jamás volverían, porque solo existían si su corazón amaba...

Un día, un rayo de sol se escabulló por entre las oscuras nubes e iluminó su rostro. La calidez que sentía, si bien no era la misma de antes, hizo que su corazón volviera a latir por unos segundos y un reflejo de sus alas se asomó por su espalda, esta vez teñidos de rojo, pues la inocencia del Angel, había sido robada.

Impulsó su cuerpo en un salto, estiró hacia el cielo sus brazos, pero aún así, no logró alzar el vuelo.
Comenzaron a caer lágrimas de desesperación por su rostro, no deseaba rendirse, pero para su desgracia, un rayo con forma de mujer apareció en el cielo, anunciando que otra era de oscuridad le sobrevendría.

- ¡NOOOO!

El Angel deseaba con toda su alma alcanzar el cielo, sentir la calidez del sol envolver su alma y aliviar el corazón, pero el cielo se cubrió nuevamente de negras nubes y con una última caricia a su rostro, el sol se despidió para siempre...

Y aunque los ángeles son inmortales, éste nunca más volvió a sentir los latidos de su corazón.

Firma para Angel Cazadora... By KiaramelO

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